¡Elija Marculli!

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“La vieja Carancho le ascendió a Central al Pitu Carniglia, tiene tres ascensos y un mundial la vieja…” ¡No me rompas más con la vieja Carancho, no pienso ir a verla!

Gorra, bermudas y sueño de amistoso, fue hace mucho, contra el “Mate” pusimos la yerba ¡Tres-a-cero! Para Argentinos, de Quilmes, por un peso te agrando la cerveza. ¡Argentino de Quilmes! Prestame tu cornisa, empujame. ¡Empatazo con Lanús! Empatito con Chicago. Aflojamos en el campeonato y en la Copa Argentina, ¿nos cuidábamos para los amistosos?

La vieja Carancho… ¡Basta, me lo dijiste mil veces..!

“Me mintieron”, me habían dicho que no hacía falta que salga en los centros.

¡En serio, la vieja no falla..!

¿Muchos caudillos? Trajimos otro, ¡Quiroga! Con este te la peleo en cualquier territorio, de visitantes, adonde sea, con su valor… ¡Ah, perdón! ¿No es el tigre de los llanos? ¿Le dicen ‘Popi’? ¡ol??í, olí , olí, Popi, Popi…! mmmmm…

¡Alguno que juegue como en YouTube! 8 años, 35 partidos por año, 8 x 35 x 90, ¡25.200 minutos! Los videítos duran 20, ¡ni el 0.1%! ¡Jugadores editados! Editame el 0.1% de cualquier cosa que hice en mi vida, y soy Einsten pensando, Federer jugando al tenis, y un símbolo sexual… si hubiesen filmado, esteeee… bueno, era muy pibe, pero te juro, ¡si los editás todos juntos! ¡Mamita!

¡Basta con la vieja Caranchooooo! Mattiuzzo, tiene que tener virtudes, yo todavía no le encontré ninguna, cualquier cosa les aviso.

Central, último, el Pitu fue a ver a la Carancho… ¡pum para arriba! Metió ascenso. La vieja te hace elegir, tenés dos deseos, elegís uno. Rosario Central ascendió, pero la mujer del Pitu todavía no queda embarazada, ¡vieja turra!

La vieja Carancho cree que hay vida después de la muerte, que los muertos caminan entre nosotros, ¿no estarán jugando todos en Platense? Prefiero creer en la pretemporanza de Colón, en la delgadez de Barreiro, en la ingravidez de Rodriguez, en los abdominales de muzzarella de Peralta, en la endiablada endeblez de Ruiz, prefiero creer que Toni Camo terminará su trabajo de hipnosis con Matos, en Confurcio Pansardi, ¿un cinco de oro, un ocho de basto o un cuatro de copas…? en la “zeta” de la mesa de Meza, en Obregol… pero a la vieja Carancho no me la fumo.

Pasaje Lituania 5432, puerta de chapa, cartelito que dice “pase”. “Son quinientos”, dijo la vieja. Entregué rápido la plata. “Siéntese”. Me agarró la mano, la puso palma para arriba y me pasó un rodillito cargado con tinta roja. Cuando tuve toda la palma cubierta de rojo, me tomó fuerte de la muñeca y se “zampó” mi mano en su teta izquierda, por debajo del vestido, retiró mi mano, me miró fuerte y me dijo: “Elija Marculli ”. Con voz finita y asustada dije: “Yo no me llamo Marculli”, “no me contradiga, elija Marculli… 2014… ¿Argentina campeón del mundo o el ascenso de Platense? Elija…” ¡Vieja adivina! Yo no le dije que era hincha de Platense, la vieja me sostenía la mirada, si yo la bajaba me avergonzaba de ver una copia roja de mi mano posada sobre su teta izquierda asomada. “¡Dije que elija, Marculli! Si duda afecta la eficacia de mis poderes”, me dijo, haciendo gala de un convincente discurso.

Cuando me fui, yo tenía quinientos pesos menos, una esperanza y una resignación. Mientras caminaba por Altolaguirre me sentía raro… había que elegir… elegí… ¡Vieja de mierda! Ojalá se cumpla… pura tinta calamar.